El amor de mi vida

Mi primer post, dedicado al amor de mi vida.

Aunque en este momento estemos separados, aunque jamás lea estas palabras, él es, fue y será mi gran amor...

Si bien soy de aquellas que sostienen que el ser humano es capaz de vivir varios amores maravillosos a lo largo de su vida, debo reconocer que en la mia existe uno que siempre estará por encima del resto.
A riesgo de volverme tan cursi como los pseudoenamorados que siempre critico, me permitiré , tan solo por esta vez, ubicarme en esa postura lastimosa en la cual los ojitos nos brillan y hablamos de la vida como si el mundo fuera un degrade de lila repleto de mariposas de colores revoloteando alrededor. Me lo permitire esta vez, porque el testimoniar esto vale la pena. En fin, a lo que iba....

Se que he sido muy afortunada de haber podido experimentar un sentimiento mutuo tan maravilloso, puro e incondicional. Se tambien que no todos pueden jactarse de lo mismo.
Nos amamos desde el primer momento, solo vernos y acercarnos hizo el milagro.
Nos amamos porque nos amamos, mas alla de todos los rotulos, del entorno y de cualquier intento de explicación posible.
Tan solo basto mirarnos a los ojos y sonreirnos para que el mundo, los otros y las palabras sobraran.
Ninguna relacion es perfecta, y nuestra convivencia tampoco lo fue. Hubo, como en todo vinculo, confrontaciones, celos y desencuentros. Pero rescato - otra vez - la incondicionalidad del sentimiento y los momentos cuyo recuerdo me iluminan el alma una y otra vez.

Las tardes de sol compartidas en la plaza, en medio de risas.
Su compañia indeclinable en mis noches de insomnio. Jamas soporto verme llorar. En esos casos, me colmaba inagotablemente de cariño hasta que volviera a sonreir.
Nos unieron las cosas simples y magicas de la vida ( cuanto mas simples, mas magicas). Los abrazos, el sol, la musica, el aire y el agua.

Nuestras diferencias nunca interfirieron. Si bien yo era capaz de pasar horas leyendo y perderme en los parrafos de "Un año con Schopenhauer o "La insoportable levedad del ser", o de emocionarme hasta las lagrimas al escuchar "El bolero de Ravel", el podia continuar viviendo perfectamente sin Freud, Buda, Ravel ni Kundera. Pero que importaba ? Si cuando yo "bajaba a tierra" el y su sonrisa estaban ahi, firmes, a mi lado.

Les deseo a todos que en algun momento de su vida, al menos, puedan experimentar una magia similar.

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Para quienes se preguntan quien es el afortunado objeto de amor ( o el pobre infeliz, dependiendo de la opinion que les merezca quien escribe),
comparto con uds. la foto del morocho
mas hermoso del mundo.

Se llama Hypocrates. Lo amo. Y es mi perro :)

Mi Hypo en Gessel :)

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